¿ES IMPORTANTE LA SEGURIDAD EN EL HOGAR?

El envejecimiento, la discapacidad, las enfermedades degenerativas, las crónicas o permanentes, etc., provocan limitaciones funcionales en las capacidades físicas, sensoriales o psíquicas. El desempeño ocupacional se ve alterado de forma significativa. Es entonces, cuando empezamos a pensar en el tema de seguridad en el hogar y su importancia.

Esto supone que, a veces, la integridad física y seguridad de la persona se vean afectadas dentro del hogar, al realizar las actividades de la vida diaria.

También sabemos que la mayoría de las personas prefieren vivir en su propio hogar que en una residencia, o en casa de sus hijos o cuidadores.   

Se intenta mantener la autonomía e independencia, pero a veces, esto no es posible.  

Debemos procurar que la realización de las actividades se haga de forma segura y evitando situaciones de riesgo.

PERO ¿QUÉ VALOR LE DAMOS NOSOTROS?

Mantener un hogar seguro se hace primordial, tanto para familiares, cuidadores y las propias personas , como para los profesionales que nos dedicamos a adaptar los espacios.

A veces, no somos conscientes las propias personas de las situaciones de riesgo que pueden darse dentro del hogar.

¿Quién no ha escuchado noticias de personas mayores que han pasado horas, e incluso días, en el suelo de su casa por una caída?

Desde Hogar+Vida intentamos evitar o disminuir en todo lo posible las situaciones peligrosas.

Nos podemos encontrar desde la necesidad de adaptaciones sencillas, como:

  • instalar un sistema de detección de humos,
  • una barra de apoyo en la ducha,
  • llevar relojes, colgantes e incluso bastones con GPS,

Pero también instalaciones más complejas:

  • sistemas completos de protección del hogar,
  • alarmas en baños,
  • botones de asistencia,
  • cámaras de video vigilancia,
  • alarmas en las puertas y ventanas…

¿CUÁL ES EL PAPEL DE LA PERSONA IMPLICADA?

Siempre se ha de tener en cuenta su opinión, no se deben realizar modificaciones o instalaciones sin su aprobación.

Por ejemplo, no podemos implantar un sistema de video vigilancia con cámaras sin el consentimiento de la persona a vigilar, se está invadiendo su intimidad, así como de toda la persona que en el domicilio se encuentre

Además, no se puede pecar de excesivamente prudentes e impedir que la persona sea parte activa, la autonomía de la persona es tan importante como su seguridad

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